Es sin duda, el producto preferido por los contratistas, en la construcción de falsos plafones, marquesinas, muros aparentes, alojamientos de ductos y cualquier otra aplicación donde se requiera tener buena adherencia y resistencia, tanto para yeso, el mortero y el cemento, evitando las grietas por el movimiento normal de los materiales.
El tamaño de rollos, el bajo precio por metro cuadrado, la disponibilidad y los diferentes acabados en que se surte (sin pintar, pintado en negro y galvanizado) lo hacen ser un material inigualable para estas aplicaciones.